RECUPERAR LO PERDIDO
3 abril, 2011 
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Nuestra proxima meta : RECUPERAR LO PERDIDO
En los últimos años el ejercicio de la profesión de Graduado Social ha sufrido importantes cambios, por un lado nuestras actividades se han informatizado casi en un 100 por 100, ya no solo para las clásicas prestaciones de elaboración de nominas y seguros sociales si no además en todos los ámbitos de nuestras actividades se hace preciso el contar con medios y conocimientos informáticos, e igualmente por otro lado hemos consolidados los cambios dentro de las actuaciones ante los órganos judiciales tanto en el procedimiento laboral como en el concursal.
Actualmente el papel del Graduado Social en los juzgados es cada vez más el propio de ser “el director del negocio jurídico” , del que hablaba en mi artículo del año 2005 , que el “del recadero” en que querían algunos colegios de abogados que nos convirtiéramos. Ya nadie nos puede negar hoy nuestra presencia en los procesos laborales y concursales.
Es cierto que por otro lado no hemos sabido mantener nuestra posición de ventaja dentro del mercado de las gestiones de las nominas y los seguros sociales, que fueron actividades propias y casi exclusivas de nuestra profesión, lo que se evidencia con el número de autorizaciones que existen para trasmitir por el sistema red donde ya somos superados por el conjunto de otras profesiones y donde estamos a la par en número de autorizaciones con los abogados. Y esto es sin duda algo causado por la muy mala gestión que se hizo desde el consejo al cambiar el texto de convenio que existía con la TGSS sobre el Sistema Red (convenio Rojo) por el actual texto de convenio (convenio San Martin). Sobre esto ya escribimos desde la asociación en su día un detallado informe.
Tengo la esperanza que esto último se cambie para mejor como consecuencia de las denominadas “reservas de actividad” que incluirá la anunciada “Ley de Servicios Profesionales” , sobre la que dijo, en su última intervención ante su partido, el 2 de Abril pasado, el presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero seria una realidad antes de terminar esta legislatura.
Así que por ahora, mientras esperamos la dicha Ley, creo que la profesión debería de aunar esfuerzos, y dedicarnos a todos los niveles a la meta de recuperar una parcela profesional que nos fue arrebatada en el año 2003 y que ahora tenemos la oportunidad de recuperar.
Como todos sabemos por medio del artículo 23 de la Ley 52/2003, de 10 de diciembre, de disposiciones específicas en materia de Seguridad Social, se quitó del conocimiento de la jurisdicción social de todas las reclamaciones contra las resoluciones sobre trámites de carácter administrativo y recaudatorio de los órganos de la Seguridad Social y que desde el inicio de la dicha jurisdicción laboral habían venido siendo resueltas por la misma.
Y también todos sabemos que tal cosa supuso que la dicha reforma incidió de un modo directo en los cometidos profesionales de los Graduados Sociales, pues dentro de nuestra actividad profesional normal esta los de efectuar tramites referidos a los actos de afiliación, alta, baja y variaciones de datos de trabajadores, así como en materia de liquidación de cuotas, actas de liquidación y actas de infracción y con respecto a los actos de gestión recaudatoria.
Con la dicha exclusión del ámbito de la jurisdicción laboral se aparto la intervención profesional del Graduado Social en las acciones de impugnación de tales actos de los órganos de la Seguridad Social pues la norma de procedimiento ante los tribunales contenciosos administrativos exige que la representación procesal y defensa se realice por medio de procurador y abogado. Por lo tanto la reforma de la ley de procedimiento realizada en su día, quitando esas materias del conocimiento por la jurisdicción laboral, supuso dejarnos a los graduados sociales fuera de las reclamaciones de judiciales contra dichos actos de la TGSS que era algo que si hacíamos cuando de esta materia se resolvía ente los órganos judiciales laborales.
Ahora ante la nueva reforma del texto procesal laboral, que se pretende igualmente esté terminada dentro de esta legislatura, se tiene la oportunidad de dar cumplimento de lo establecido en el artículo 545.3 de la Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio, del Poder Judicial y de que se puedan recuperar lo que eran parte de las competencias profesionales de los Graduados Sociales.
Para conseguir esta meta hemos hecho ya desde la Asociación una propuesta por escrito a nuestro Consejo General de Colegios de Graduados Sociales para que pida, como le corresponde hacer, que se modifique el texto de la nueva ley de procedimiento laboral, en un modo que consideramos viable, pues no significaría mayor trastorno al orden procesal judicial.
Y así, por medio de ese modo, cuyo contenido y detalle no vamos ahora a publicar por elemental y necesaria discreción, la profesión recuperaría posibilidad de elaborar las impugnaciones de los actos administrativos dictados por la Tesorería General de la Seguridad Social, como hacían antes de la reforma procesal introducida por la Ley 52/2003, de 10 de diciembre, de disposiciones específicas en materia de Seguridad Social.
Si conseguimos tal meta y la “Ley de Servicios Profesionales” sienta las bases para acotar el campo de actuación de cada profesión, con independencia de la colegiación obligatoria, nuestra profesión acabara de consolidarse y podrá ver al futuro sin temores.
Eugenio de la Cruz Silva
Soy estudiante de Relaciones Laborales y Recursos Humanos, y cada día me siento más decepcionada de haber elegido está carrera.
Es una pena estar estudiando 1 año entero Dº del Trabajo, 1 año entero Dº de la Seguridad Social, y en las materias que más formados estamos, no tenemos competencias, está carrera esta condenada a ejercer trabajos de simples administrativos (que para nada intento desvalorar la profesión, yo he estudiado dos ciclos formativos de administración y he aprendido muchísimo) pero yo estudié y elegí está carrera para poder ser una profesional en el ámbito laboral y de la seguridad social, que por algo es la carrera que más profundiza hoy por hoy si no revisen el plan de estudios de Grados en Derecho y verán que no ven ni la mitad de lo que nosotros estudiamos.
Espero que el Colegio de Graduados Sociales haga algo al respecto y valoren de una vez está profesión.
Lo cierto es que en principio las profesiones jurídicas (las 3, abogados, procuradores y graduados sociales) van a requerir colegiación obligatoria. Y lo veo perfecto. No creo que una asociación pudiera representar (lease, hacer presión ante el gobierno de turno) tan eficazmente como la que hace el consejo general actualmente.
La verdad es que en todas partes cuecen habas, y por alguna manzana podrida (que yo no conozco ninguna) no se puede desacreditar la labor que se hace por los colegios, que es más de lo que muchos piensan (¿nadie recuerda a quien debemos haber accedido al recurso de suplicación?, la lucha para conseguir el turno de oficio por graduados sociales, la futura ley de acceso a la profesión, etc…).
Personalmente yo no tengo más que buenas palabras tanto para los colegios como para el consejo general.
Mientras tanto el …………… de Javier San Martín, sigue haciéndole la pelota a su amiguito del alma, Javier Airbar, otro tan maravilloso como su tocayo.
Ahora, forma parte del tribunal del premio Franciso Rojo, tanto monta, monta tanto, Javier como Javier, entre los dos están acabando con la profesión.
Dña. Marisa Rubio Pérez.‐ Vda. de D. Francisco Rojo.
∙ D. Francisco Vieira Morante.‐ Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
∙ D. Ignacio Moreno González‐Aller.‐ Presidente de la Sala de lo Social del TSJ de Madrid.
∙ D. Javier Aibar Bernad.‐ Director General de la TGSS.
∙ D. Germán Barreiro González.‐ Catedrático de Derecho del Trabajo de la Universidad de León.
∙ D. Javier Fernández Blanco.‐ Consejero y Director General Adjunto del grupo MGO.
∙ D. Francisco A. Rodríguez Nóvez.‐ Director de la Escuela de Práctica Profesional “Alonso Olea”.
Totalmente de acuerdo, aunque se tendrá que manifestar el Consejo General de GS. al respecto; esperando que está propuesta no sea rechazada y se luche por alcanzarla.
Desde luego es una verdadera vergüenza que se permita a la TGSS, utilizar a la profesión para experimentar, y luego la denoste, permitiendo que cualquiera realice gestiones en materias de seguridad social, con ún cursillo de 15 días, luego pasa lo que pasa…